Gaviota Cocinera Juvenil

Increiblemente, los ejemplares juveniles de muchas aves tienen colores de plumajes opuestos a sus padres. Esto confunde muchas veces a los observadores novatos, pues resulta una rareza tan grande diferencia.
Un caso frecuente en la zona andina -imagino también en la costa atlántica- es la Gaviota Cocinera. Un ejemplar adulto es, vista en vuelo y desde abajo, es predominantemente blanco, con pequeñas zonas negras en las alas, más precisamente en las plumas primarias. Desde arriba tiene un manto negro sobre las alas y lomo con una línea blanca sobre las plumas terciarias.
Pero el juvenil tiene un plumaje gris parduzco, incluso pardo y de rostro enmascarado. Sin duda muy diferente del adulto. Le tomará tres o cuatro años llegar a la blancura de su adultez.